Opciones
Una opción
es un contrato que brinda a su comprador el derecho, y no la obligación, de comprar o vender
determinado activo a un precio preestablecido durante un período de tiempo determinado. Se paga, además, un
precio por tener ese derecho de compra o venta. Esto es lo que se conoce como
prima y puede observarse en las planillas de cotizaciones.
Las
opciones pueden ser sobre acciones, EtF, futuros o pares de divisas.
Muchos inversores recurren
a las opciones porque les resulta
muy atractiva la idea de tener una pérdida máxima limitada. Lo peor que puede
ocurrir es perder la prima que pagó por ella, mientras que las ganancias pueden
ser muy grandes y hasta, en algunos casos, teóricamente infinitas. Si bien esta
característica es conveniente si se utiliza bien, también hay que considerar
otro tipo de ventajas que usan los
más sofisticados.
Existen estrategias
que permiten apostar a prácticamente cualquier rango de precios para el futuro
de un determinado activo. Además, brinda la posibilidad de armar estrategias que apuesten a aumentos o descensos de los
niveles de volatilidad en un activo o en el mercado en general.
Si
bien éstas no son del todo sencillas para los inversores sin mucha experiencia,
no se requiere tampoco ser un experto operador para implementarlas de manera
consistente.
Con opciones
pueden armarse estrategias de bajo
riesgo, e incluso son muy utilizadas para cubrir los riesgos de una posición
determinada, lo cual indica que de ninguna manera son solamente el dominio de
los inversores más agresivos y sofisticados. Como suele suceder con estos
temas, la clave radica en aprender a utilizarlas de manera eficiente para
sacarles el máximo provecho posible.
0 comentarios:
Publicar un comentario